domingo, 4 de noviembre de 2012

Let's live our love.

Ahí estaban ellos, solos en medio de la plaza mientras las frias gotas de lluvía empapaban sus abrigos. Eran dos, enamorados, ausentes, libres, felices.
-Tengo ganas de gritar- dijo ella apartandose un mechón de la cara.
-¿El qué mi amor?- él la miraba curioso mientras ella se ponía de pie sobre un banco.
- Que te quiero.
-Y yo a ti, ya lo sabes mi vida.- él la miraba con su mirada cálida y dulce mientras sonreía y le acariciaba la cara lentamente.
-No, no solo eso.
-¿Qué más?
Ella llenó los pulmones de aire. El mundo entero permaneció en silencio mientras ella gritaba con todas sus fuerzas.
-Que no quiero separarme nunca de ti, que estoy loca, loquísima de amor. Que eres el único que acelera mi corazón cada vez que te veo, que me encantaría vivir entre tus brazos, tus besos tus caricias.
Él reía, y se preguntaba que como podía ser tan afortunado de haberla encontrado. De poder disfrutar de su compañía día a día. Eran jóvenes,sí, el 19 y ella 18, pero ambos tenían claro que algo habían encontrado en la vida, el amor.
El joven subió al banco con ella, y la congió en sus brazos, y la besó. Contrástando un beso cálido con las gélidas gotas de lluvia resvalando por sus mejillas.
-Vámonos lejos- Le susurró él - solos, tú y yo, empecemos la aventura de nuestra vida.
-Como si es al fin del mundo cariño, yo contigo me fugo a dónde sea.